Cuando llega enero y decides hacer los semilleros te encuentras con un bote con un montón de
semillas de guindillas. Entonces tienes que decidir cuantas plantas quieres
tener, en realidad con una sola planta es suficiente, pero no todas las
semillas germinan por lo que tienes que poner bastantes en el sustrato.
Cuando llega el momento de repicarlas tendrías que decidir
poner la más grande y sana. Pero es fácil que durante el trasplante alguna no
arraigue y hay muchas posibilidades que en
los primeros días del trasplante algún alacrán cebollero o barreneta termine
por comerse la base del tallo y matar la planta.
Por eso siempre intento poner 3 plantas con la esperanza de que una de ellas llegue a adulta, si hace
mucho aire y se dobla puede romperse, si su cuela una gallina es fácil que se
la coma
y si hace mucho calor y el
goteo no funciona en los primeros días puede
secarse y morir.
Hay veces que se mueren las 3 matas y bien trasplantas
alguna otra que quede o toca ir a un vivero
a comprar alguna.
Otras veces arraigan las 3 perfectamente y es entonces
cuando habría que dejar solo una o como máximo 2 ya que son suficientes. Pero
entonces ya da pena
arrancar y tirar esas plantas en
las que has puesto ganas y tiempo.
Al final hay años con
las suficientes guindillas para gastar, guardar y regalar, otros años si me descuido al final tengo pocas o no
tengo.
Entiendo que te de pena arrancar las plantitas una vez que han están crecidas. ¡vivan las guindillas!
ResponderEliminarUn beso enorme.