Hace más de un mes que sembré el perejil, aunque la germinación inicial es
lenta, mantener la tierra o sustrato húmedo ayuda que sea más rápida.
Una vez germinada y con unas temperaturas altas como las de este año el
crecimiento está asegurado. Tan solo requiere riegos cada vez que el sustrato
se ha secado, en mi caso 2 veces a la semana. Una vez germinado hay que
procurar que no le falte humedad ya que una sequía excesiva provocará que le
ataque el mildiu. (Manchas mohosas, amarillas y blancas), aunque hay que tener
en cuenta que el perejil no soporta el encharcamiento.
A partir de ahora dispondré de perejil todo el invierno y no será hasta la
próxima primavera cuando se espigue sacando flores y semillas.
Aguanta perfectamente el frio, aunque con los días con temperatura bajo cero
sus hojas se estropean, por lo que es mejor que esté en un sitio resguardado.
El perejil se puede recolectar y dejar secar, pero sus propiedades y su
perfume no son las misma que recién recolectado.
miércoles, 20 de septiembre de 2017
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