Después de mi paso ayer por el vivero para comprar melones me vuelvo a dar cuenta de la importancia de disponer de un semillero siempre activo.
Del primer paso, que
es cuando se planifica la huerta de verano y se decide que plantones serán necesarios,
ya he escrito en varias ocasiones
llegando a la conclusión que es necesario realizar el semillero a mitad de
enero.
Pero de no tener el semillero calefactado hay semillas y
plantones que por mucho que nos empeñemos necesitan disponer de una temperatura
en la tierra alta para germinar y calor en el semillero para crecer. Es el caso
de pimientos o berenjenas entre otros .
Por ello es un error realizar el semillero en un solo día.
Hay que ir viendo las necesidades de la huerta, los fallos
en los trasplantes y los ciclos de cada planta para ir pasando los plantones
del semillero a su lugar definitivo en
la huerta. Renovar plantas enfermas o continuar con cultivos acabados hasta la llegada del invierno
hace que tengamos que plantar varias
veces durante la primavera y el verano.
Es cierto que todo esto se puede solucionar comprando
semanalmente plantones en un vivero con el ahorro que supone en tiempo. Pero
nos perdemos ese primer ciclo de la germinación y nos
supone tener que pagar creo que un precio excesivo por cada plantón comprado.
Por ello esta semana limpio el semillero que se ha llenado
de hierba, aporto tierra nueva y coloco semillas para incorporarlas al huerto cuando estén listas
(como pepino)
Tanto la germinación como el crecimiento a partir de ahora serán muy
rápidas.
Tener tu propio semillero da trabajo pero a la larga es una buena inversión ¡excelente trabajo, Kisi!
ResponderEliminarMil besos.
Hola MOntse! Tu lo has dicho al final es un excelente inversión. Aunque muchas veces es frustrante cuando no germinan o cuando los brotes se los comen los caracoles. Pero eso forma parte del trabajo.
EliminarOtros mil besos para tí.