Los plátanos siguen creciendo y engordando, ya comienzan a parecerse a los plátanos que se pueden encontrar en los supermercados. Todavía están muy duros y verdes, aun les queda tiempo de maduración.
A la platanera le gusta el sol, también el riego, su tronco es prácticamente todo agua. No le gusta el viento que rompe y corta sus hojas pero aguanta casi todo
incluso las heladas que acaban con ellas y luego tienen que volver a rebrotar de nuevo.
Ya es posible ver su flor, es muy bonita va creciendo desde los plátanos hacia el suelo y poco a poco se va abriendo.
Habrá una treintena de plátanos, ya tengo ganas de probarlos pero todavía habrá que esperar.
lunes, 11 de agosto de 2014
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Que platanera más buena. Besitos.
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